
La startup colombiana Loto Latam cerró una ronda pre-semilla de US$1 millón, con la participación de Fen Ventures, Crestone VC, QAPU Ventures y Desygn Capital. La startup, fundada en mayo de 2026 por Daniel Camacho y Pedro Ignacio Morales, busca reinventar la forma en que las pequeñas y medianas empresas (pymes) de la región gestionan sus gastos corporativos y entregan incentivos a sus colaboradores.
La idea surgió de un dolor vivido en carne propia. “Estuvimos trabajando en Alfred, y la conciliación y legalización de las facturas de caja menor y gastos operativos era un dolor enorme. Intentamos solucionarlo con varias plataformas, pero ninguna realmente se acopló a los sistemas y tamaños de la empresa”, explicó Camacho a Forbes. “De ahí comenzamos a entender que las empresas mid-market y pymes en Latinoamérica están completamente desatendidas en este aspecto”.
El diagnóstico indica que cerca del 70% de las nuevas pymes en Colombia cierran en menos de cuatro años, principalmente por falta de acceso a crédito y a herramientas tecnológicas de gestión.
“Como demostración de esto, se evidencia que solamente el 20% de pymes en Colombia tienen acceso a productos de crédito. En los casos específicos que estudiamos más a fondo, lo principal es que hay un efecto enorme por parte de gastos ‘hormiga’ o fraude interno. Al no tener visibilidad, corregirlo o solventar el efecto en el P&G es muy complejo”, agregó el cofundador.
La propuesta de Loto combina tarjetas de crédito o débito con un software contable que automatiza procesos, registra y legaliza gastos en tiempo real y ofrece mayor visibilidad para dueños y equipos financieros. A esto se suma una línea de negocio de incentivos corporativos mediante tarjetas Visa, lo que permite a las empresas entregar beneficios a empleados sin depender de comercios aliados.
Desde mayo, Loto ha sumado más de 100 clientes en Colombia, entre ellos Amarilo, Stilotex, Creditop y KTM Powershop. Según indicadores proporcionados de la empresa, el producto está encontrando mercado: 0% de churn, un NPS superior a 90 y que el 85% de las nuevas adquisiciones provienen de referidos.
“La mezcla de perspectivas de Pedro desde la operación y la mía desde el lado financiero ha tenido una influencia grande en cómo se diseñó la plataforma. Dicho esto, creo que lo más importante es escuchar a los clientes y las necesidades que van saliendo”, señaló Camacho, al tiempo que destacó que la misión de Loto es “crear un vehículo de impacto en la región” que dé claridad a las pymes y oportunidades de crecimiento a los colaboradores que hacen parte del proyecto.
El capital fresco será utilizado para acelerar tracción en Colombia, donde la fintech proyecta alcanzar 500 empresas usuarias al cierre de 2025, y preparar el terreno para abrir un segundo mercado en 2026.
La startup colombiana Loto Latam cerró una ronda pre-semilla de US$1 millón, con la participación de Fen Ventures, Crestone VC, QAPU Ventures y Desygn Capital. La startup, fundada en mayo de 2026 por Daniel Camacho y Pedro Ignacio Morales, busca reinventar la forma en que las pequeñas y medianas empresas (pymes) de la región gestionan sus gastos corporativos y entregan incentivos a sus colaboradores.
La idea surgió de un dolor vivido en carne propia. “Estuvimos trabajando en Alfred, y la conciliación y legalización de las facturas de caja menor y gastos operativos era un dolor enorme. Intentamos solucionarlo con varias plataformas, pero ninguna realmente se acopló a los sistemas y tamaños de la empresa”, explicó Camacho a Forbes. “De ahí comenzamos a entender que las empresas mid-market y pymes en Latinoamérica están completamente desatendidas en este aspecto”.
El diagnóstico indica que cerca del 70% de las nuevas pymes en Colombia cierran en menos de cuatro años, principalmente por falta de acceso a crédito y a herramientas tecnológicas de gestión.
“Como demostración de esto, se evidencia que solamente el 20% de pymes en Colombia tienen acceso a productos de crédito. En los casos específicos que estudiamos más a fondo, lo principal es que hay un efecto enorme por parte de gastos ‘hormiga’ o fraude interno. Al no tener visibilidad, corregirlo o solventar el efecto en el P&G es muy complejo”, agregó el cofundador.
La propuesta de Loto combina tarjetas de crédito o débito con un software contable que automatiza procesos, registra y legaliza gastos en tiempo real y ofrece mayor visibilidad para dueños y equipos financieros. A esto se suma una línea de negocio de incentivos corporativos mediante tarjetas Visa, lo que permite a las empresas entregar beneficios a empleados sin depender de comercios aliados.
Desde mayo, Loto ha sumado más de 100 clientes en Colombia, entre ellos Amarilo, Stilotex, Creditop y KTM Powershop. Según indicadores proporcionados de la empresa, el producto está encontrando mercado: 0% de churn, un NPS superior a 90 y que el 85% de las nuevas adquisiciones provienen de referidos.
“La mezcla de perspectivas de Pedro desde la operación y la mía desde el lado financiero ha tenido una influencia grande en cómo se diseñó la plataforma. Dicho esto, creo que lo más importante es escuchar a los clientes y las necesidades que van saliendo”, señaló Camacho, al tiempo que destacó que la misión de Loto es “crear un vehículo de impacto en la región” que dé claridad a las pymes y oportunidades de crecimiento a los colaboradores que hacen parte del proyecto.
El capital fresco será utilizado para acelerar tracción en Colombia, donde la fintech proyecta alcanzar 500 empresas usuarias al cierre de 2025, y preparar el terreno para abrir un segundo mercado en 2026.
La startup colombiana Loto Latam cerró una ronda pre-semilla de US$1 millón, con la participación de Fen Ventures, Crestone VC, QAPU Ventures y Desygn Capital. La startup, fundada en mayo de 2026 por Daniel Camacho y Pedro Ignacio Morales, busca reinventar la forma en que las pequeñas y medianas empresas (pymes) de la región gestionan sus gastos corporativos y entregan incentivos a sus colaboradores.
La idea surgió de un dolor vivido en carne propia. “Estuvimos trabajando en Alfred, y la conciliación y legalización de las facturas de caja menor y gastos operativos era un dolor enorme. Intentamos solucionarlo con varias plataformas, pero ninguna realmente se acopló a los sistemas y tamaños de la empresa”, explicó Camacho a Forbes. “De ahí comenzamos a entender que las empresas mid-market y pymes en Latinoamérica están completamente desatendidas en este aspecto”.
El diagnóstico indica que cerca del 70% de las nuevas pymes en Colombia cierran en menos de cuatro años, principalmente por falta de acceso a crédito y a herramientas tecnológicas de gestión.
“Como demostración de esto, se evidencia que solamente el 20% de pymes en Colombia tienen acceso a productos de crédito. En los casos específicos que estudiamos más a fondo, lo principal es que hay un efecto enorme por parte de gastos ‘hormiga’ o fraude interno. Al no tener visibilidad, corregirlo o solventar el efecto en el P&G es muy complejo”, agregó el cofundador.
La propuesta de Loto combina tarjetas de crédito o débito con un software contable que automatiza procesos, registra y legaliza gastos en tiempo real y ofrece mayor visibilidad para dueños y equipos financieros. A esto se suma una línea de negocio de incentivos corporativos mediante tarjetas Visa, lo que permite a las empresas entregar beneficios a empleados sin depender de comercios aliados.
Desde mayo, Loto ha sumado más de 100 clientes en Colombia, entre ellos Amarilo, Stilotex, Creditop y KTM Powershop. Según indicadores proporcionados de la empresa, el producto está encontrando mercado: 0% de churn, un NPS superior a 90 y que el 85% de las nuevas adquisiciones provienen de referidos.
“La mezcla de perspectivas de Pedro desde la operación y la mía desde el lado financiero ha tenido una influencia grande en cómo se diseñó la plataforma. Dicho esto, creo que lo más importante es escuchar a los clientes y las necesidades que van saliendo”, señaló Camacho, al tiempo que destacó que la misión de Loto es “crear un vehículo de impacto en la región” que dé claridad a las pymes y oportunidades de crecimiento a los colaboradores que hacen parte del proyecto.
El capital fresco será utilizado para acelerar tracción en Colombia, donde la fintech proyecta alcanzar 500 empresas usuarias al cierre de 2025, y preparar el terreno para abrir un segundo mercado en 2026.