El ecosistema mundial de pagos está experimentando una importante remodelación a medida que la norma ISO 20022 se convierte en el nuevo estándar universal para la mensajería financiera. En noviembre de 2025, los bancos de todo el mundo tendrán que adoptar este formato rico en datos para los pagos transfronterizos y de alto valor o se arriesgarán a incumplir la normativa y a una posible desconexión de las principales redes de compensación. Sin embargo, aunque muchas entidades comprenden la importancia de cumplir este plazo, ¿cuántas están preparadas para migrar y obtener las ventajas de ISO 20022, como CBPR+?